Hugo y el segundo aniversario...

...de este acontecimiento familiar.

La receta del "Hugo" va así: Cava con sirope de sauco, lima y menta. Muy recomendable para una tarde de primavera veraniega (ya que los saucos en plena flor ahora precisamente dan el marco adecuado).

Spreewald...

 ...se llama en alemán el Bosque del Spree, paisaje idílico de miles de ramificaciones del emblemático rio de Berlín, declarado reserva de la biosfera por la UNESCO en 1991 y destino clásico de excursiones para turistas de todo el mundo con una edad media de unos 60 añitos minimo ;-)

El programa normal, por eso, consiste en dar una vuelta por los canales en estos tipicos barcos, una visita al castillo de Lübben (uno de los dos pueblos importantes de la zona) y comer pepinillos, producto estrella del Spreewald.

 Nosotros (ya que bajamos la mencionada media de edad notablemente!) preferimos un programa mucho mas deportivo: una ruta en bicicleta, siempre siguiendo el rio, unos 70 kms hasta Beeskow. Todo eso por el Spreeradweg, un camino para bicicleta desde las fuentes hasta su embocadura en el Havel (otro rio mas grande) en Berlín.

 Siguen unas impresiones de la ruta...

 que ya no requieren mas explicaciones...

 El picinic lo tomamos en Alt Schadow a orillas del Neuendorfer See. El bocata de pastrami llevaba pepinillo! Como no !! Buenisimo!!!

 Siguen mas bosques de pino, de abedul, de pino, de ribazo, de pino y mucha acacia tambien, saturando el aire con su perfume abrumador. Pino también habia mucho. Olian tambien mucho a pino los pinos...

 Inauguré la temporada de baño en el Tiefer See justo antes de llegar a...

 ...Beeskow donde después de visitar sus murallas, torres, la plaza  mayor y iglesia tomamos el tren de vuelta a casa.

Puente de mayo

 Haciendo de turistas en la propia ciudad con excursiones al Jardin Botánico...

 ...en plena temporada de azaleas y paeonias...

 ...y tantas otras cosas de las que no conocemos los nombres...

 ...aqui por lo menos cada mes va cambiando el programa floral.

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 Y ayer al Teufelsberg, desde donde se puede ver toda la ciudad un día como este.

 Casi tocando el cielo ya, soñamos con sacar las alas y mirarnoslo desde aun mas arriba...

Picknick in the Park

Pasado sabado cumplí las 50 vueltas por el sol y este cumplió por su parte con un bonito marco para nuestro proposito. Fue una bonita celebración entre amigos y familia, pasteles, café, té y cava. No faltarón mantas ni termos...

...ni vela...

...ni girnalda...

...ni flores por la mañana en casa.

Un día perfecto! Gracias a todos!
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 Y el día siguiente inauguramos tres de los regalos: manta de picnic, termo y bicicleta nueva. El set completo para una bonita tarde de domingo en el Tiergarten.

En la vuelta a casa descubrimos un nuevo sitio cerca de nuestro barrio. Un café con terraza tipo "Biergarten" en un antiguo café de estación de trenes. Tomamos un refresco de diseño, de estos ahora tan de moda. Jaume probó flor de sauco, yo, más clásico, limón. Volveremos un día para probar sus Flammkuchen...